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Me gustaría decirte

  • Foto del escritor: Karina Sarmiento Torres
    Karina Sarmiento Torres
  • 11 may 2024
  • 3 Min. de lectura

Entre la esquina de la calle Ribeyro y la calle Parreño hay doscientos veinte pasos. Cada mañana, en ese cortísimo trayecto, mientras mi perra avanza con la calma de sus doce años, caigo abstraída en una larga conversación en la que te llevo conmigo a lo largo del variado escenario que habita la cuadra. En ese espacio vacío en el que mi sueño me ha transportado, me sumerjo entera, ausente del resto y tú, ignorante, me acompañas. Tus ojos  que brillan cuando me observan, hacen que, de vez en cuando en el recorrido, yo baje la  mirada abrumada. Sonrió, sonrío, esos ojos tuyos que me encantan.



Mientras avanzamos te voy contando historias que no tienen sentido, dos personas que caen precipitadas por una pared inclinada, es una obra de danza, digo. Es un escenario grandísimo, una estructura montada los contiene, pero parece que caen, caen. No sé a donde caen, te digo y tú, me dices para qué. Esa ridícula fantasía mía con la que tú juegas y me observas sorprendido. Luego, ya no hay más danza, son los pajaritos amarillos encima de un pasto cansado que me distraen. Ese mismo pasto que mi perra olfatea descifrando mensajes de otros de su especie. Los pájaros me hacen ver las acacias, que dan sombra a casi toda la manzana. Entonces, el mundo real, me para y me pregunta por la perra, qué linda es, dicen y tú ríes y ríes, de mi respuesta, supongo, o tal vez, de la pregunta, cuantos años tiene, y la sentencia, cuídela, no la saqué hace mucho sol. Sabes que tantas preguntas me abruman o tal vez me asustan. Cuanto amo al mundo, ese mismo mundo al que tú le tienes cuidado, haciendo lo correcto. Yo, te provoco, digo, el estoico. Me das la mano y seguimos avanzando. La construcción ya casi está lista, dices, pronto te mudarás, quiero ver el nuevo espacio y tú me lo quieres mostrar cuando todo esté listo. Tu espacio, tuyo, tuyo. Yo digo que es inútil tanto lugar para cada uno. Tú, el ermitaño, me vuelves a mirar, ahora estás allá. Y yo acá. 


Ahora soy yo la que danza, es cuando un hombre me detiene y sorprendido me dice, a su perrita si le gusta pasear va muy atenta a cada momento del paseo. Yo lo miro y respondo que sí, que le gusta saber cada cosa que pasa en el vecindario. Ya tú de vuelta, de que vas ahora, me preguntas,  estabas bailando, me dices. Sigue, sigue, me  gusta ver a tu cuerpo bailar. Continúo, estoy allí en la caja negra. Doy vueltas, la música de Philip Glass al fondo, danza IX de glassworks, el corazón se agita, se agita.  Tú lo sientes y tocas mis dedos, tal vez para que no caiga con la emoción que se desprende de cada pedazo de mi piel, ahora es tu tacto sutil que me sorprende. Y no puedo más y me lanzó a reír. Cómo parar esta absurda manifestación de felicidad que me desborda y bruscamente, me devuelve a la realidad de autos que no paran, mi perra que sigue con su olfateo, y las bicicletas y la gente también pasan. Tus dedos, tus dedos. 


El último tramo de la cuadra, nuevamente la calle Ribeyro. Trato de volver al mundo. Un último pensamiento, en las calles de Lima, donde camino orgullosa de este nuevo tiempo que me habita. Poderosa de mí misma, donde vas conmigo, en tu propio espacio, ni tan cerca, ni tan lejos. Tomando un vino y coqueteando ambos, o viendo una peli tomados de la mano y un beso espontáneo a los dedos descansados, o terminando de pintar las sillas del balcón, o viendo las imágenes de un libro que sorprende o leyendo el texto de ese libro que te regalé. Tú, mi hombre corriente, yo, tu mujer corriente. Comemos, caminamos, reímos, lloramos, gemimos, gritamos, caemos, nos levantamos, nos mojamos, nos secamos, nos salen canas, nos viene la vida, nos envuelve la calma. El paseo parece que termina, es tiempo, siempre es tiempo. No todo dura para siempre, no es en eso lo que pienso. Solo miro nuevamente tus ojos y no me deja de sorprender esa manera en que así como si nada me traspasan. Dices me voy y ya te has ido. Subo con mi perra al departamento y preparo un café.







 
 
 

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